jueves, 10 de diciembre de 2009

Cuento: Nosotros Somos águilas


Un campesino atrapó un pichón de águila,y lo colocó en el gallinero.Comía mijo y la ración propia de las gallinas.Un día recibió la visita de un naturalista.
Mientras paseaban por el jardín, dijo el naturalista:
-Este pájaro que está allí no es una gallina. Es un águila.
-Pero yo lo crié como gallina, y se transformó en gallina,a pesar de las alas de casi tres metros de extensión.
-No –replicó el naturalista.Ella es y será siempre un águila.Pues tiene un corazón de águila,que la hará un día volar a las alturas.
-No, no –insistió el campesino.Jamás volará.
Decidieron hacer una prueba.El naturalista tomó el águila,la levantó bien en alto y le dijo:"Ya que usted es en realidad un águila y pertenece al cielo y no a la tierra, entonces,¡abra sus alas y vuele!"
El águila miraba distraídamente alrededor.Vio a las gallinas allá abajo, picoteando granos.Y saltó junto a ellas.
Al día siguiente, el naturalista subió ella al techo de la casa, y le susurró:"Águila, ya que usted es un águila, ¡abra sus alas y vuele!"
Pero, cuando el águila vio allá abajo a las gallinas,saltó y fue junto a ellas.
El campesino sonrió y volvió a la carga: "Yo le había dicho"
-No –respondió firmemente el naturalista- Vamos a experimentar una última vez.
Al día siguiente, el naturalista y el campesino tomaron el águila y la llevaron afuera de la ciudad,lejos de las casas de los hombres,en lo alto de una montaña.
El sol naciente doraba los picos de las montañas.
El naturalista levantó el águila al cielo y le ordenó:"Águila, ya que usted es un águila,ya que usted pertenece al cielo y no a la tierra,¡abra sus alas y vuele!"
El águila miró alrededor.Temblaba como si experimentase una nueva vida.Pero no voló. Entonces, el naturalista la tomó firmemente en dirección del sol,para que sus ojos pudiesen llenarse de la claridad solar y de la vastedad del horizonte.
En ese momento, ella abrió sus potentes alas,graznó con el típico kau, kau de las águilas y se levantó, soberana,sobre sí misma.Y comenzó a volar, a volar hacia lo alto,a volar cada vez más alto. Voló... voló..hasta confundirse con el azul del firmamento...
Fuimos creados a imagen y semejanza de Dios. Pero nos acostumbramos a pensar como gallinas,mirando hacia abajo buscando granos para picotear.Águila,amiga de las montañas e hija del sol:¡Despierte de su sueño!¡Revele su fuerza interior!
Recuerda siempre tu origen divino, desarrolla el "Recuerdo de sí". Todos los problemas de la vida son para que recuerdes quién eres y temples tu espíritu, y no para que te lamentes. Despierta de tu sueño y vuela libre con el viento...

Ésta es una historia narrada por James Aggrey

1 comentario:

  1. Que potente descripción.Buscando desesperadamente una palabra que me saque de este estado de desesperanza ,me encontr esta reflexión y me sentí tan identificada.
    Soy esa águila,amiga de las alturas el sol.
    Necesito los vientos cálidos del espíritu de Dios para remontarme de nuevo recordando lo que soy.
    Gracias......encontré en esta descripción el aliento que el cielo está enviando a muchos que están viviendo el día malo.
    Me ha bendecido.

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