viernes, 8 de noviembre de 2013

EL PLAN DIVINO
Un Plan único para cada ser
 (en este libro lo nombran como "leyenda personal")



 
Acuérdate de saber siempre lo que quieres.

    “… la gente siempre está en condiciones de realizar lo que sueña”

   “La vida quiere que vivas tu Leyenda Personal”

      "Alguien que de verdad te ame jamás te separará de tu Leyenda Personal."

    "Sí tu corazón tiene miedo, explícale que el miedo a sufrir es peor que el mismo sufrimiento; y que ningún corazón jamás sufrió cuando fue en busca de sus sueños, porque cada momento de búsqueda es un momento de encuentro con Dios, y con la eternidad."
           “Las ovejas, sin embargo, le habían enseñado una cosa mucho más importante: que había un lenguaje en el mundo que todos entendían, y que el muchacho había usado durante todo aquel tiempo para hacer progresar la tienda. Era el lenguaje del entusiasmo, de las cosas hechas con amor y con voluntad, en busca de algo que se deseaba o en lo que se creía.”  

    "Cuánto más se aproxima uno al sueño, más se va convirtiendo la Leyenda Personal en la verdadera razón de vivir."


El alquimista / Paulo Coelho

miércoles, 23 de octubre de 2013

Ciclo de cine sobre el Plan Divino para cada ser
 Cada lunes de noviembre 2013, en Santa Cruz de Tenerife

jueves, 26 de septiembre de 2013

Ejemplos del Servicio de la Hueste Angélica

“Cuando se me envió a Sumatra por primera vez, en el año 1856, fui el primer misionero europeo que se introdujo entre los fieros Battaks, aunque veinte años antes, dos misioneros americanos habían llegado a ellos con el evangelio; pero los habían asesinado y devorado. Desde entonces no se había hecho ningún esfuerzo por llevar el evangelio a estas gentes.
           Los dos primeros años que pasé entre los Battaks, al principio solo, y después con mi esposa, fueron tan duros que todavía me hace estremecerme el recordarlos. A menudo daba la impresión de que no sólo estábamos rodeados por hombres hostiles, sino también por siniestros poderes de la oscuridad; pues a menudo nos sobrecogía un temor inexplicable, de modo que nos teníamos que levantar durante la noche y arrodillarnos para rezar, o leer la Palabra de Dios, para encontrar alivio.
    Tras haber vivido en este lugar durante dos años, nos mudamos a una zona del interior con otra tribu que nos recibió con más amabilidad. Allí construimos una casita con tres habitaciones, y la vida se volvió un poco más alegre y fácil para nosotros.
   Cuando llevaba algunos meses en este nuevo lugar, vino a visitarme un hombre del anterior distrito. Yo estaba sentado en el banco delante de nuestra casa, y él se sentó a mi lado, y durante un rato habló de esto y lo otro. Finalmente me dijo: “bueno, tuan (maestro) tengo otra petición”. “¿Y cuál es?”. “Me gustaría echar un vistazo a tus vigilantes”. “¿A qué vigilantes te refieres? No tengo ninguno” “Me refiero a los vigilantes que situabas alrededor de tu casa por las noches para protegerte”. “Pero yo no tengo vigilantes”, dije de nuevo; “sólo tengo un chico pastor y una joven cocinera, y servirían bien poco como vigilantes” Entonces el hombre me miró con incredulidad, como diciendo “oh, no trates de hacerme creer lo contrario, pues lo sé bien”. Después preguntó: “¿Puedo registrar tu casa, para ver si están escondidos allí?”. “Sí, por supuesto”, dije riendo. Así que entró y buscó en cada esquina, incluso bajo las camas, y salió muy decepcionado. Entonces yo inicié también una pequeña investigación pidiéndole que me dijera las circunstancias relacionadas con esos vigilantes de los que me hablaba, y esto es lo que me contó:
        “Cuando viniste a nosotros por primera vez, tuan, estábamos muy enfadados contigo. No queríamos que vivieras entre nosotros; no confiábamos en ti, y creíamos que tenías algún plan contra nosotros. Así que nos reunimos, y decidimos matarte a ti y a tu mujer. Así que fuimos a tu casa noche tras noche; pero cuando nos acercábamos siempre había alrededor de la casa una doble fila de vigilantes con brillantes armas, y no nos atrevíamos a atacarlos para entrar en tu casa. Como no queríamos abandonar nuestro plan, fuimos a ver a un asesino profesional (había entre los Battaks en ese entonces una casta especial de asesinos, que mataban por dinero a cualquiera al que se deseara hacer desaparecer). Él se rio de nuestra cobardía, y nos dijo “No temo ni a dios, ni a demonio. Pasaré fácilmente entre esos vigilantes”. Así que fuimos todos juntos por la noche y el asesino, con su arma sobre la cabeza, fue valientemente delante de nosotros. Cuando estuvimos cerca de tu casa, nos quedamos atrás y lo dejamos ir solo. Pero al poco tiempo regresó corriendo y nos dijo: “no, no me atrevo a ir solo; dos filas de hombres grandes y fuertes están ahí, muy juntos, hombro con hombro, y sus armas brillan como el fuego” Entonces desistimos de matarte. Ahora dime, tuan, ¿quiénes son esos vigilantes? ¿Nunca los has visto?” “No, nunca los he visto” “¿Y tu mujer tampoco?” “No, tampoco ella” “Pero todos nosotros sí los hemos visto, ¿cómo es eso?” 
    Entonces entré en la casa y traje la Biblia, y le dije: “Mira, este libro es la Palabra de de Dios, en el que promete cuidarnos y protegernos, y nosotros creemos firmemente en esa Palabra; por eso no necesitamos ver a los vigilantes; pero vosotros no creéis, así que el Buen Dios tiene que mostraros a los vigilantes, para que aprendáis a creer”.

Este relato se conserva en los registros de las misiones pioneras en las Indias Orientales. El incidente ocurrió en la vida de Von Asselt, un misionero renano, en Sumatra desde 1856 a 1876, y fue relatado por él mismo durante una visita a Lübeck. Extraído y traducido del libro “The Hand that Intervenes”, de William Spicer.
 

 

 

 

miércoles, 24 de julio de 2013

Flower Power . Película sobre el Plan Divino individual

 

       Esta película, basada en hechos reales, presenta una amena exposición del cambio profundo que experimenta un ser humano, y sus circunstancias, cuando toma la decisión de asumir su razón de ser, su Plan Divino .
      Es significativo que comience con una ruptura. El protagonista ha llegado a ese nivel de conciencia en que para dar marcha atrás tendría que engañarse a sí mismo (y de este modo, también a sus seres queridos).
   Es la disyuntiva que vemos en la película "Matrix", cuando los que ya han "despertado" se hacen conscientes de que asumir nuestra Libertad supone la responsabilidad de elegir la opción más elevada en cada situación que se nos presente. El que no quiere dar su máxima Luz, se convierte en el "traidor": si no eres fiel a ti mismo, es imposible que le seas fiel a nada ni a nadie. Paradójicamente, el humano justifica estas decisiones involutivas - funcionar por debajo de tu verdadero nivel de conciencia - utilizando a quienes le rodean como pretexto: lo hago por el bien de...mi pareja, mis amigos, mis hijos, mis nietos, mi perro, mi...
       La película comienza con el protagonista situado en esta arquetípica encrucijada, en la que se han visto todos esos seres que han dejado a su paso por la Tierra huellas de Luz, porque tuvieron el valor de tomar la decisión que Ellos sabían era la más elevada, la correcta: el Amado Gautama Buddha, Jesucristo, Su Madre, María, Muhammad, Gandhi, la Madre Teresa de Calcuta y un largo etcétera de Luminarias para la humanidad. Hoy, como siempre, la religión fácil no existe. El Sendero del Logro es empinado. El protagonista abandona el "yo tengo" (una pareja, una casa, un trabajo, unos ingresos, una "seguridad") por el "Yo Soy" = un Plan Divino, algo que sólo yo puedo aportar al Universo, y que no seré verdadera y permanentemente feliz hasta que lo manifieste.
    El paso de una cárcel de régimen cerrado, a otra donde hay más libertad, y por tanto la Oportunidad de realizar el Plan Divino de cada uno, representa un cambio de conciencia por parte de los protagonistas. Y, como suelen hacer los seres humanos con los cambios, aunque sean para bien, de entrada no lo asumen. El protagonista dice: "me ha llevado mucho tiempo acostumbrarme a esta cárcel, así que prefiero que me dejen aquí"
    Es eso lo que está ocurriendo en la actualidad en el Planeta Tierra, y es grande la Oportunidad y Responsabilidad que implica para todos los encarnados en este momento ( por más que tantos se distraigan dando energía a los espejismos creados por el miedo). Sólo hay una salida a toda dificultad, y es asumir nuestro SER individual y poner la atención ADENTRO Y ARRIBA., para que cada uno dé su máxima LUZ, sin distraerse con lo que hacen los demás. "El mundo cambia con tu ejemplo, no con tu opinión".  

      Los jueces del concurso, el ministro del interior, en esta película, representan el conglomerado de las opiniones humanas que nos rodean, y que pueden tener en nuestro camino la función que nosotros elijamos darles: usarlas como excusa para claudicar y por comodidad no seguir hasta el fin nuestras propias metas, o para fortalecernos y aclararnos. Nuestro corazón nos guía con voz clara y firme, pero suave y respetuosa. No grita ni interfiere con nuestro libre albedrío, como hacen todas esas voces que nos rodean. De nosotros depende poner la atención en el "griterío" externo de las opiniones humanas, o en la Dulce Voz del Silencio.
     La Reina, que no coincide con los "juicios" de quienes reparten "los premios" en el concurso, representa a la Presencia I AM. Es bellísimo ver con qué alegría y ligereza caminan hacia Ella los protagonistas que han obedecido a la citatoria de Su Llamada, y cómo todo lo pomposo y falso de la personalidad (representado en este caso por el ministro) se queda afuera.
     Interesante consultar en "Boletines Privados de Thomas Printz" las múltiples referencias que el Amado Santo Aeolus (anterior Mahá Chohán) hace a la "jardinería" y a los "jardineros".